La “tradición” de la vida comunitaria por el Lic. Luis Enrique Capeletti

11-11-2021 Opinion

 

obra

Este pasado 10 de Noviembre,  Día de la Tradición en Argentina, resuena en mi cabeza de antropólogo este concepto tan propio de la disciplina. Pienso para mis adentros, excavando en lo hondo de lo disciplinar y aquello que se vive y encarna, herencia cultural. Muchas veces, negativa, viviéndola como un yugo pesado (machismo, racismo). Pero otras, bellamente engalanadas por lo popular y ancestral. Y me digo, y digo, más allá de mi amor por este, que no solo el folclore, disfrazarse de gaucho o paisanita, bailar algún género musical local o la comida es tradición. También lo es la organización vecinal, la cooperación, la ayuda mutua, el apoyo mutuo. Convocarse en pos de una causa justa, una cooperadora escolar, un beneficio ante algún problema de salud, el ejercicio legítimo de pugnar por los derechos, el reclamo por una conducta ética y moral a nuestros representantes, un No a una obra innecesaria. Que, de lejos, o cerca, es impuesta a los deseos y necesidades locales.

El domingo pasado, 7 de noviembre, vecinos de la ciudad dieron muestras de una clara tradición. Organización de un evento público con participación comunitaria, danzas, humor, música, títeres y payasos. Charlas, encuentros, risas. Una creativa forma pacífica de manifestarse. En la antigua Plaza Libertad, corazón del casco histórico de Chajarí, se vio como la auto organización desinteresada, o interesada en ser escuchados, es posible.

Se cumplen 150 años de un decreto fundacional y unos 146 del comienzo como ciudad. Por esos días, en esta misma plaza del barrio norte, los vecinos locales y extranjeros pidieron a las autoridades ser escuchados. Los originarios que les permitan continuar en sus tierras y junto a los migrantes llegados: escuela, juzgado y sacerdote. En ese mismo lugar se levantó el primer edificio comunitario, la capilla Santa Rosa, por el esfuerzo de los vecinos. Y poco después, en 1889, se celebraba la <fiesta democrática>, los primeros comicios municipales.

Algo que se oculta o invisibiliza con el concepto de tradición solo asignado a las pilchas, la comida, la música o el baile es la capacidad de autogestión, solidaridad y autorrepresentación que tienen las comunidades. Un rasgo destacable en la historia de la humanidad, la búsqueda de una ética orientada a la vida comunitaria con, para y en un planeta-hogar, ñande roga.

 

 

Para cerrar recuerdo unos versos de don Atahualpa Yupanqui:

“El estanciero presume

de gauchismo y arrogancia.

El cree que es extravagancia

que su peón viva mejor.

Mas, no sabe ese señor

que por su peón tiene estancia.

Aquel que tenga sus reales

hace muy bien en cuidarlos;

pero si quiere aumentarlos

que a la ley no se haga el sordo.

Que en todo puchero gordo

los choclos se vuelven marlos.”

 

 

NO A LA OBRA BAJO PASO NIVEL

POR EL LICENCIADO  LUIS CAPELETTI 

Autor: Oscar Arnau