Cuando las cosas no salen como queremos Por Natalia Paoli

20-10-2023 Opinion

Hace algunos años, solía vivir cada experiencia de una manera muy personal. Si algo salía mal o enfrentaba un fracaso, me veía a mí misma como un fracaso y, si las cosas no salían según lo planeado, me consideraba un desastre. ¿Alguna vez te sentiste así?

¿Qué podemos hacer cuando nuestros planes se tuercen? ¿Cómo dejar el sufrimiento que nos genera el sentirnos un fracaso? 

La respuesta radica en aprender a desvincularnos de esas situaciones, reconocer que no somos lo que nos sucede y entender que el fracaso no marca el fin del camino, sino una oportunidad de crecimiento y superación.

Solemos apegarnos a los resultados, tanto es así que creemos que esa es nuestra identidad. Creemos que los resultados nos definen y te prometo que si aprendemos a desvincularnos de esa creencia podemos transitar las circunstancias difíciles de otra manera, sin tanta carga y malestar físico y mental.

Antes de darte 3 herramientas para comenzar a practicar una nueva forma de vivir frente a las adversidades, quiero compartir algunas figuras icónicas de la historia que también experimentaron el fracaso en su camino hacia el éxito:

Walt Disney: Antes de fundar la exitosa empresa Disney, fue despedido de un periódico por falta de creatividad y enfrentó la bancarrota varias veces.

Thomas Edison: A pesar de ser conocido por inventar el foco, previamente a eso, experimentó miles de intentos fallidos. Cuando se le preguntó sobre estos fracasos, respondió: «No he fracasado, simplemente he encontrado 10.000 maneras que no funcionan».

J.K. Rowling: La autora de la serie Harry Potter recibió múltiples rechazos editoriales antes de que una editorial finalmente publicara su obra. Hoy en día, es una de las autoras más exitosas de todos los tiempos.

Oprah Winfrey: superó una infancia difícil y enfrentó varios fracasos laborales antes de convertirse en una influyente presentadora de televisión y empresaria.

Steve Jobs: A pesar de ser despedido de su propia empresa, Apple, Steve Jobs regresó para convertirla en una de las compañías más valiosas del mundo.

Abraham Lincoln: Experimentó numerosos fracasos políticos antes de ser elegido presidente de los Estados Unidos, hoy es considerado uno de los mejores presidentes de la historia del país.

Y así podría seguir nombrándote personas que superaron el «fracaso» gracias a su mentalidad, porque esa es la clave para nuestro avance en la vida; una mentalidad de crecimiento!. No somos nuestros fracasos ni las dificultades que enfrentamos, tenemos la capacidad de superar obstáculos y crecer ante cada circunstancia difícil.

Y si llegaste hasta acá con la lectura, es porque estás comprometid@ con tu crecimiento personal, por eso voy a regalarte las 3 herramientas que te prometí, necesarias a la hora de vivir situaciones que no salieron como esperábamos. .

Herramienta 1: Es una pregunta poderosa: «¿Qué no funcionó?». En momentos de dificultad, solemos culpar a factores externos, pero aquí te propongo un cambio de enfoque. En lugar de señalar hacia afuera, preguntate: «¿Qué no funcionó? ¿Fui yo o hubo otros factores?». Esta pregunta te ayuda a analizar la situación de manera objetiva y reconocer tu responsabilidad en lo sucedido. Aprender de tus errores y crecer se vuelven posibles.

Herramienta 2: «Actitud sin Excusas» A veces, nos aferramos a excusas y culpamos a factores externos, como el gobierno o la falta de ayuda, por no alcanzar lo que deseamos. Pero aquí te propongo un cambio. En lugar de buscar excusas, observá qué aspectos no están funcionando como deseas. Pregunta: «¿Qué no está ocurriendo como quiero?». Al hacerlo, asumís la responsabilidad de tu vida y recuperas el poder de cambiar lo que no funciona. Deja de buscar culpables externos y enfoquémonos en lo que podes controlar y mejorar.

Herramienta 3: Lee la siguiente meditación una y otra vez hasta conectar con la verdad que hay en estas palabras y luego me contás, sé que vas a encontrar paz:

 Yo soy yo, no soy ese plan que no funcionó, yo soy yo. 

Yo soy yo, no soy la desilusión, no soy la frustración que siento en este momento. 

Yo soy yo, no soy el proyecto que no funcionó. 

Yo soy yo, soy más que el plan, más que la frustración, porque todo eso lo puedo cambiar.

 Yo soy yo y estoy bien.»

La próxima vez que enfrentes dificultades, recordá que no sos lo que sucede, sos la fortaleza que te permite levantarte y avanzar.

¡El fracaso no define quién sos, sino cómo te recuperas de él!

Espero tus comentarios en este espacio y que compartas con alguien que necesite recordar que su valor no cambia más allá de las circunstancias.

Te abrazo!!

Nati

Autor: Oscar Arnau