Muy a pesar del desenlace trágico de la muerte del Comisario Duarte en el operativo en el que también murió “Pajarito” Da Rosa, los investigadores estaban seguros que la historia no terminaba allí. “Los tenemos sumamente controlados, y sabemos los movimientos que están haciendo” le confiaba a Tal Cual un importante funcionario de la Policía de Entre Ríos como resultado no solamente del rastreo telefónico, sino también de la investigación en terreno que estaban haciendo los propios funcionarios.
Siguiendo estas pistas los policías (entrerrianos, correntinos y de la PFA) llegaron hasta un campo ubicado en la zona de Garabi en búsqueda de un prófugo, miembro de la banda de piratas del asfalto del fallecido “Pajarito” Da Rosa, el próximo objetivo era Martín César Velásquez.
Este peligroso delincuente se escondía en una estancia dentro de los límites de la pequeña ciudad correntina y en una finca que es administrada por un conocido abogado santotomeño.
Ante esta noticia decidieron desplegar el operativo para detenerlo. Al llegar al lugar, los miembros de las fuerzas fuertemente armados esperaban un recibimiento parecido al propuesto por Pajarito en Alvear, que acabó con la vida del Comisario Duarte y es por ello que tomaron todas las precauciones y todas las unidades santotomeñas concurrieron al lugar, inclusive el Comisario Mayor de la Unidad Regional V Pedro Pablo Rolón. El escenario era de armas largas, nerviosismo y de ansiedad. Con el paso de las horas que inicio a las tres de la mañana del 6 de febrero, los investigadores corroboraron que Velásquez ya no estaba allí, pero habrían probado que varias horas antes sí estaba presente el temido prófugo.
No obstante se recogieron elementos de vital importancia para la causa y la situación del abogado santotomeño que arrienda esa propiedad sería compleja y estaría siendo sujeto de investigación, hablan de escuchas telefónicas, aunque se espera un informe policial brindando el nombre y apellido del protagonista.
Perseguido por la Policía Velázquez huyó por el monte y se dirigió a la localidad de San José (Misiones).
La movilización policial continuó y de acuerdo a lo consignado un grupo de la Dirección Investigaciones Complejas localizó y capturó a Pedro Manuel V. (64), hermano del principal malviviente buscado.
Las fuentes añadieron que este sujeto fue aprehendido en una vivienda ubicada en la zona rural de San José. En su poder tenía un teléfono celular que está a su nombre, pero aparentemente era asiduamente utilizado por su hermano.
Ahora, quedó alojado en una dependencia policial local a disposición de las autoridades que lo requieran, mientras los efectivos continuaban anoche ejecutando operativos de búsqueda en distintas zonas que el prófugo puede recorrer.
Se cree que el delincuente prófugo podría merodear entre las ciudades de Apóstoles, San José, Tres Capones, Azara y Concepción, además de distintos parajes a la vera del río Uruguay.
De teléfonos, zonas y pistas
Según indicaron investigadores entrerrianos consultados, sólo en esa provincia la banda se habría hecho de unos 5 millones de pesos, producto de al menos siete asaltos a colonos y estancieros y atracos a camioneros sobre la ruta nacional 14.
Pero eso no habría sido todo, ya que por las características detectadas se cree que la misma organización estaría detrás de otros ocho golpes cometidos en Corrientes y en esa línea también surge la posibilidad de un caso registrado en Misiones.
Es que algunos pesquisas de las provincias vecinas creen estar convencidos de que el crimen del camionero Sergio Federico Witschi (37), asesinado a balazos sobre la ruta 14 entre Cerro Azul y San José, también fue obra del mismo grupo.
El hecho ocurrió a fines de agosto y hasta ahora no hubo avances hacia su esclarecimiento, aunque esta serie de procedimientos que culminaron en el desbaratamiento de la banda comandada por Velásquez y el abatido Pajarito podría traer novedades de importancia.
Un vocero indicó que cuando en Entre Ríos comenzaron las detenciones en esos mismos procedimientos se secuestraron varios teléfonos celulares que luego fueron peritados y analizados.
Justamente, de ese trabajo se desprende ahora un dato que puede ser alentador para el caso Witshi. Es que las líneas telefónicas de varios de esos celulares, incluido el de Pajarito y su líder, impactaron en antenas cercanas al lugar donde el camionero fue ultimado en agosto pasado.
Esta información es considerada contundente por algunos para atribuirla a la misma banda el crimen de Witschi, aunque primero deben atrapar al prófugo y toda esta información debe ser formalizada y puesta a disposición de la Justicia misionera para poder avanzar en ese aspecto.
“Esta es una banda que cubría todo el corredor de la ruta 14, pero también atacaba a agricultores y colonos como fue en Chajarí, que es donde comenzó toda la investigación contra ellos, luego detectamos que parte de ellos también andaban por La Cruz, Alvear y Santo Tomé, así que empezamos a articular todo. El prófugo estaba asentado en Alvear últimamente, pero tiene familia y antecedentes en Misiones, su detención también podría ayudar a esclarecer casos de esa provincia”, cerró un investigador consultado.
