Un adolescente de 17 años de edad, discutió fuertemente con su novia de la misma edad y luego la golpeo. Tras ellos entró a su casa y salió de allí con un arma, disparandose un balazo que le entró en el maxilar inferior, traspasó su lengua, para terminar impactando en las piezas dentarias.
No se supo el calibre del arma que utilizó, puesto que cuando la policía llegó ya no se encontraba junto al lesionado.
Más tarde la novia se presentó en sede policial junto a su madre, donde habría relatado las circunstancias que llevaron a que se produjera el suceso. A pesar de ello, se le dio intervención al personal del Área de Criminalística policial, para que realizara las pruebas de dermotest.