A falta de autobomba, el grupo de voluntarios del cuartel de San Jaime de la Frontera siguen teniendo protagonismo en la extinción de incendios. En esta oportunidad, tuvieron que afrontar un siniestro, provistos de mangueras de media pulgada y baldes.
En la jornada de este miércoles por la mañana, los bomberos sanjaimenses tuvieron que acudir a extinguir un incendio de una vivienda en barrio Lucerito. La morada está ocupada por su dueña, una mujer anciana y viuda.
Al parecer, el foco ígneo se habría iniciado al producirse un corto circuito en una estufa eléctrica que la señora habría olvidado conectada sobre un modular, mientras ella salió a hacer trámites en el cajero automático.
A partir del modular, el fuego se extendió por el techo de paja de la vivienda que está recubierta de chapas de cinc. Además, se quemaron otros muebles pero se alcanzó a extinguirlo y salvar el resto de las pertenencias.