Tres partidos, dos equipos, una final; la tarde del domingo calurosa, inestable, no impidió que la definición del Torneo “Oscar Toledo” sea apasionante. Luego de una larga definición por penales Independiente de Villa del Rosario gritó “Campeón” por 10ma vez en su historia.
El estadio elegido para la gran final fue el Virgen de Lourdes, ambas parcialidades acompañaron nuevamente; iniciaron los primeros 45 minutos donde la principal característica era que la pelota estaba más afuera de los límites del campo de juego que dentro, (cosa rara para conjuntos como los que disputaban el partido acostumbrados al buen fútbol). De lo poco para rescatar en la primera parte, sobre el final, una arremetida de Sebastián Troncoso que el arquero Mauro Borget atajó.
Para el segundo tiempo Independiente arrancó mejor, y el primer quiebre llega con la (mala) expulsión de Enrique Troncoso, el jugador de Tiro ya tenía amarilla, cae producto de una jugada de partido, el árbitro Eduardo Delgado interpreta que el mediocampista quiso engañarlo por lo que le muestra la segunda amarilla y lo expulsa. A partir de allí las intenciones fueron de Independiente y Tiro debió reagruparse para intentar acertar alguna contra.
Finalizó el segundo tiempo y la cosa se definía en los penales.
La definición por penales fue vibrante, con goles y atajadas los arqueros se erigían como las figuras de sus equipos, luego de atajar el que le patearon “El Mora” Ruiz tomó la pelota para definirlo y Borget se lo contuvo, siguieron pateando y convirtiendo cada uno el suyo hasta que el arquero de «La Villa» le atajó el último penal a Augusto Blanco y consagró Campeón a Independiente.
Los dos mejores jugaron un partido chato, sin muchas emociones, con calor, y un campo de juego que no acompañaba en su estado; los dos mejores jugaron tres partidos, y como siempre el campeón es solo uno.
Foto: Liga de Fútbol de Chajarí
